Promoviendo la realización personal al ejercer el valor moral de la libertad en nuestra vida
En el mes de Julio, miles de familias celebramos orgullosamente ” Independence Day” asistiendo al desfile de nuestra ciudad respectivamente, haciendo parrilladas con nuestros familiares y culminando el día observando los fuegos artificiales. Celebrando que vivimos en un maravilloso país que nos ha dado tantas gratificaciones y en donde podemos ejercer nuestra libertad.
Una definición de libertad es : “la capacidad que tiene el ser humano de decisión y albedrío”. La independencia y la libertad personal es un aspecto de nuestro crecimiento, siendo muy importante y vital enseñar a nuestros hijos, esto los ayudará a crear un balance y como consecuencia vivirán en plenitud. Educar a nuestros hijos con libertad no quiere decir que ellos pueden hacer lo que les plazca cuando y como quieran.
Al contrario es primeramente tener plena conciencia de que somos “nosotros” los únicos capaces y responsables de iniciar un cambio ya sea positivo a negativo en nuestra persona y por consecuencia en nuestro entorno social. Siendo cada uno de nosotros los arquitectos de nuestra propia vida, teniendo la invaluable “posibilidad de elegir” entre construir una vida con cimientos firmes basados en valores éticos y morales junto con una buena educación o elegir obtener todo rápidamente tan solo para saciar mis necesidades básicas y construir sobre suelo inestable.
Dentro de la sociedad nos regimos por leyes, normas y reglas, que de cierta forma nos mantienen bajo control. Nos permiten ser libres dentro de los límites establecidos y a la vez garantizan que no transgredamos la libertad ni el espacio vital de los demás.
En otras palabras la libertad es un derecho que conlleva una gran responsabilidad. Es decir, a traves de mi libertad de palabra puedo expresar mi opinión y hacer que mi voz tenga valor y al tener libertad de pensamiento puedo generar un juicio a traves del basado en mi criterio.
“Para tener libertad es necesario mantener la integridad sin perder la elección de ejercer mi voluntad. Somos libres de actuar siempre que asumamos las consecuencias de nuestros actos”.
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Por ejemplo un adolescente es libre de elegir si quiere enfocarse en los estudios y lograr un buen desempeño escolar teniendo como meta la culminación de una carrera universitaria si esta es una de sus prioridades o también puede elegir no asistir a clases, incumplir con las tareas y tomar el camino que lo lleve a las adicciones ya sea por curiosidad o por presión social, tendrá que hacerse responsable del futuro incierto y carente de educación que dará como resultado conseguir un empleo donde tenga que trabajar tiempo extra para salir con los gastos básicos del mes.
La decisión es personal, puesto que únicamente él tendrá que afrontar las consecuencias de sus elecciones. En muchas ocasiones nuestros hijos o nosotros mismos hacemos o decimos algo motivados por la impulsividad y las emociones y cuando ya estamos más calmados y hemos reflexionado sobre el asunto nuestra perspectiva cambia radicalmente.
Por eso ahora más que nunca es importante ayudar a nuestros hijos a saber pensar reflexivamente, utilizando un criterio analitico, teniendo en cuenta que si quieren hacer lo que les plazca , sin considerar sus valores ni principios y sin dar explicación de sus actos no buscan libertad, sino libertinaje y este los llevará indudablemente a ser esclavos de sus malas decisiones.
Otro aspecto de la libertad es la emocional, teniendo en cuenta que para algunas personas es más complicado lograr una independencia emocional que les permita vivir su individualidad dentro de sus relaciones interpersonales y mássi hablamos de la etapa de la adolescencia donde se crea apego rápidamente y se llega a creer que si les falta tal persona o no tienen tal cosa que desean en su nuestra vida no están completos y no pueden ser felices.
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Fortalecer el autoestima y trabajar con nuestros hijos en la toma de decisiones estimulando en ellos el criterio analitico los ayudara a tomar mejores decisiones dentro de las cuales hayan contemplado las posibles consecuencias y esten plenamente conscientes de que tomaron la mejor opción posible. Lo maravilloso de la vida es que cada instante podemos redireccionar nuestro camino y reprogramar nuestra mente para seguir avanzando hacia la realización personal.
“Seamos libres, sin que nuestra felicidad dependa del exterior busca tu plenitud y no permitas que nada ni nadie esclavice tu ser.”